By Nicole Arencibia, APRN, Fertility Center of Miami
C uando se trata de fertilidad, hay dos factores clave que suelen mencionarse: la calidad de los óvulos y la cantidad de óvulos. Aunque suenan similares, representan aspectos muy diferentes de la salud reproductiva, y ambos juegan un papel fundamental en tu camino hacia la fertilidad. En el Fertility Center of Miami, creemos que entender la diferencia entre ambos te permite tomar decisiones informadas y seguras sobre tu futuro.

La cantidad de óvulos se refiere a cuántos óvulos tus ovarios son capaces de producir. Cada mujer nace con una cantidad finita de óvulos, normalmente entre uno y dos millones al nacer.
Con el tiempo, este número disminuye de forma natural a medida que los óvulos se liberan durante la ovulación o se pierden por procesos naturales.
Al comenzar la pubertad, la cantidad de óvulos se reduce a alrededor de 300,000–400,000, y solo 300–500 serán ovulados a lo largo de la vida.
Para evaluar tu reserva ovárica o cantidad de óvulos, los especialistas en fertilidad utilizan pruebas específicas como:
Prueba de la hormona antimülleriana (AMH): esta hormona es liberada por los pequeños folículos de los ovarios. Un nivel más alto de AMH suele indicar una mayor cantidad de óvulos, mientras que un nivel bajo puede sugerir una reserva ovárica reducida.
Conteo de folículos antrales (AFC): esta ecografía mide la cantidad de folículos visibles en los ovarios al inicio del ciclo menstrual. Estos folículos representan los óvulos que tu cuerpo podría reclutar ese mes.
Combinando los resultados de AMH y AFC, tu especialista obtiene una imagen clara de tu reserva ovárica o cantidad de óvulos.
Mientras la cantidad nos indica cuántos óvulos tienes, la calidad de los óvulos nos habla de qué tan saludables son, y esa es una diferencia esencial.
Los óvulos de buena calidad tienen mayor probabilidad de convertirse en embriones sanos tras la fertilización, aumentando así las posibilidades de un embarazo exitoso.
El factor más importante que influye en la calidad de los óvulos es la edad.
Los óvulos más jóvenes tienden a tener una mejor calidad y mayor potencial para convertirse en embriones viables.
Los óvulos de mujeres mayores pueden presentar más anormalidades cromosómicas, lo que puede afectar la fertilidad o aumentar el riesgo de aborto espontáneo.
Por eso, dos mujeres con la misma cantidad de óvulos pueden tener resultados muy diferentes según su edad y calidad ovocitaria.
La calidad de los óvulos comienza a disminuir de forma natural alrededor de los mediados de los 30, con un descenso más notable después de los 37 años. Sin embargo, cada historia de fertilidad es única y estas edades pueden variar de una mujer a otra.
Aquí es donde la congelación de óvulos (criopreservación de ovocitos) se convierte en una opción poderosa. Congelar tus óvulos a una edad más temprana te permite preservar óvulos de mejor calidad para usarlos en el futuro, incluso si la cantidad o calidad disminuye con el tiempo.
En el Fertility Center of Miami, utilizamos herramientas personalizadas para asesorarte sobre la congelación de óvulos, tomando en cuenta tu edad, niveles hormonales y metas reproductivas, para crear un plan ajustado a tu realidad y prioridades.
Tanto la calidad como la cantidad de óvulos son importantes, pero de maneras diferentes:
Si la cantidad de óvulos es baja, puede haber menos óvulos disponibles para recuperar o fertilizar.
Si la calidad de los óvulos es baja, incluso un número alto de óvulos puede no generar embriones saludables.
Por eso, el cuidado de la fertilidad nunca es igual para todas. La mejor estrategia depende de tus resultados individuales y tus metas personales. Por ejemplo:
Una mujer de finales de los 20 puede tener una cantidad moderada de óvulos, pero una excelente calidad, ideal para congelarlos.
Una mujer de principios de los 40 puede tener aún varios óvulos, pero con menor proporción genética normal, lo que hace que la planificación y el tiempo sean cruciales.
Comprender el equilibrio entre tu calidad y cantidad de óvulos te permite, junto con tu especialista, tomar decisiones informadas sobre los próximos pasos en tu tratamiento o preservación de la fertilidad.
La congelación de óvulos no se trata de urgencia o miedo, sino de crear opciones.
Al congelar tus óvulos a una edad más temprana, los preservas con la calidad que tienen en ese momento. Eso significa que, incluso años después, podrás usar esos óvulos más jóvenes y saludables cuando decidas formar una familia.
Esta opción puede ser muy empoderadora, porque:
Te brinda tranquilidad y flexibilidad para tu futuro.
Te permite enfocarte en tu carrera, relaciones o metas personales sin la presión del “reloj biológico”.
Te ayuda a sentir que tienes el control de tu fertilidad, sin importar lo que la vida traiga.
En el Fertility Center of Miami, acompañamos a nuestras pacientes paso a paso, desde las pruebas iniciales hasta la estimulación, recuperación y congelación— con claridad, empatía y apoyo constante. Nuestro objetivo es ayudarte a tomar decisiones seguras sobre tu salud reproductiva.
Entender tu fertilidad es el primer paso para tomar control de ella. Ya sea que tengas curiosidad sobre tu estado actual o estés planificando para el futuro, la información es poder.
La calidad y la cantidad de óvulos son indicadores importantes, pero forman parte de un panorama más amplio que incluye tu salud general, tu estilo de vida y tus metas personales.
Nuestros especialistas pueden ayudarte a interpretar tus resultados y diseñar una estrategia personalizada, ya sea para concebir pronto o preservar tu fertilidad para más adelante.
Tu camino hacia la fertilidad es profundamente personal y debe avanzar a tu propio ritmo.
Si deseas comprender mejor tu calidad y cantidad de óvulos o explorar opciones de preservación de la fertilidad, agenda una consulta con el Fertility Center of Miami.
Nuestro equipo experto te acompañará en cada paso (desde las pruebas hasta el tratamiento) para que tomes decisiones seguras sobre tu futuro.
Contáctanos hoy mismo y da el primer paso para tomar el control de tu salud reproductiva.